José De Bejar
José De Bejar nació en España y se trasladó al Río de la Plata a comienzos del siglo XIX, radicándose en Montevideo, donde contrajo matrimonio y posteriormente se naturalizó ciudadano oriental. De espíritu emprendedor, se destacó como comerciante, logrando amasar una considerable fortuna en el ámbito mercantil, lo que lo posicionó como una figura influyente dentro del patriciado económico de la época. Su solvencia financiera y prestigio social lo impulsaron hacia la vida pública, siendo electo diputado por el Departamento de Montevideo en 1840.
Su participación más relevante se dio en el área económica del naciente Estado uruguayo. En 1841 fue designado Ministro de Hacienda por el presidente Fructuoso Rivera, en sustitución de Alejandro Chucarro. Desde ese cargo, debió afrontar los desafíos de estabilizar las finanzas de un país que aún se encontraba en etapa de consolidación institucional y que pronto ingresaría en uno de los períodos más complejos de su historia: la Guerra Grande. Su gestión se caracterizó por intentar mantener el equilibrio fiscal en un contexto de escasos recursos, deuda creciente y demandas militares constantes.
De Bejar ocupó la cartera de Hacienda en reiteradas ocasiones: el 8 de julio de 1843, el 20 de octubre de 1845, y nuevamente desde diciembre de 1846 hasta julio de 1847. En algunos de estos períodos, también estuvo al frente del Ministerio de Gobierno, combinando así la administración económica con la gestión política interna en plena guerra civil. Además, integró la Asamblea de Notables creada en 1846, reafirmando su papel como figura central en el esfuerzo de resistencia institucional del gobierno de Montevideo.
La intensidad de su participación política y el peso de sus responsabilidades afectaron su salud, lo que lo llevó a emprender un viaje a Europa en 1848 en busca de recuperación. Se instaló brevemente en Londres y luego en París, donde residían familiares, entre ellos su yerno Ramón Baradere, ex cónsul francés en Montevideo. En la capital francesa sufrió un ataque cardíaco que le causó la muerte el 26 de abril de 1849.
Además de su trayectoria política y económica, José De Bejar tuvo un rol destacado en los orígenes de la masonería uruguaya. Fue miembro fundador de la Logia Tolerancia y de la Logia Capitular Independencia en 1830, y se desempeñó como Venerable Maestro de la Logia Beneficencia en 1832, lo que confirma su influencia en los círculos intelectuales y filantrópicos de su tiempo.
José De Bejar dejó una huella importante en la estructuración inicial de la Hacienda Pública uruguaya, actuando en uno de los momentos más críticos de la historia nacional y siendo una figura clave en el sostenimiento administrativo del gobierno durante la Guerra Grande.